A partir de la pandemia las plataformas de streaming y aplicaciones de películas y series tuvieron un gran boom de popularidad que se sostiene hasta la actualidad. La practicidad de ver cualquier contenido desde la comodidad del sillón de casa atrae a muchos consumidores mensualmente. Mes a mes, los precios de las aplicaciones y plataformas internacionales se van actualizando junto con el dólar y los impuestos aplicados al servicio. Los aficionados del séptimo arte deben mantenerse al tanto de los aumentos y cambios en los planes de suscripción.
Netflix:
Básico: $6.921 pesos
• Estándar: $11.590 pesos
• Estándar, y una casa extra: $15.613 pesos
• Premium: $15.615 pesos
• Premium y una casa extra: $19.638 pesos
• Premium y dos casas extras: $23.662 pesos
Estandar mensual: $7.399
• Estandar anual: $62.149
• Premium mensual: $10549
• Premium anual : $88.599
Prime Video
Estandar: $5.633 pesos
MAX (ex HBO Max)
Estandar: $4.652 pesos
El primer semestre de 2024 se mostró realmente desafiante para poder ganarle a la inflación a través de inversiones financieras. Aunque el IPC del Indec viene en carrera descendente mes a mes, Argentina todavía ostenta el trono como el país con la inflación más alta del mundo: aunque ésta se ubique ahora en la zona del 5% mensual, prácticamente duplica a la tasa anual de la mayoría de las economías del mundo.
Por este motivo, al analizar las inversiones más ventajosas, hay un punto central a tener en cuenta: la inflación acumulada de casi 80% que tuvo Argentina entre enero y junio. Y si se contempla el 25,5% de diciembre, la inflación alcanzó el 126% desde el cambio de gobierno. A la vez, un segundo punto es si, efectivamente, la inversión dejó alguna ganancia medida en dólares, aún si se estuvo perdiendo contra la inflación.
Con esta vara “bien alta” hubo una posición que pudo coronarse ganadora de la primera mitad del año, el plazo fijo UVA, que dejó un beneficio del 60% medido en dólares, y que además obtuvo una ganancia respecto de la inflación.
Nery Persichini, Head of Research de GMA Capital, indicó que “ en el primer semestre, el Plazo Fijo UVA (atado a inflación) fue imbatible. Rindió 126% en pesos y 61% en dólares. Sacando el rally del bono TO26, fue destacado lo de bonos soberanos en dólares (+30% en dólares) y acciones (+24% en dólares)”. En cuanto a los inversores que apostaron al dólar, éste avanzó solo 40% en pesos entre enero y junio, mientras que el tipo de cambio oficial se movió apenas un 13 por ciento.
En el mismo sentido, los bonos soberanos en pesos de corto plazo que indexaron por CER se alinearon con lo que fue el rendimiento de los plazos fijos UVA, con un alza de 60% medido en dólares “contado con liquidación” (CCL).
No obstante, Persichini advirtió que el panorama podría cambiar para la segunda parte del año. “En junio hubo un giro de 180% grados. La demanda de cobertura volvió. Bonos dollar-linked fueron el activo con mejor performance (+10%), seguidos de cerca por Bopreal (+9,5%). El CCL se despertó: escaló 9,5% en el mes, e hizo que la brecha trepara desde 38% hasta 48%” respecto del dólar mayorista.
Asimismo, el dólar libre escaló a lo largo de mayo un 18,8%; un 11,4% en junio, y en la primera semana de julio adicionó otro 2,9%, que lo posiciona muy por encima de la inflación en las últimas semanas, aunque sigue negativo en el recorrido del 2024, con una mejora nominal del 37,6% -desde los $1.025 del cierre del año pasado- contra una inflación que avanzó unos 40 puntos porcentuales más.
En cuanto a las acciones argentinas, hay que subrayar que fueron una apuesta con extraordinarios beneficios en los últimos tres años, aunque en el primer semestre de 2024 fueron contados los papeles que engrosaron la cartera inversora. Los bancos destacaron con alzas que duplicaron la posición en dólares, según la paridad del “contado con liqui”: Banco Macro (+100,1%), Grupo Galicia (+77%) Banco Francés (+70%) y Banco Supervielle (+67,7%).
Sin embargo, a partir de junio se observó una rápida toma de ganancias, que quedó reflejada en el retroceso del índice S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, que cayó un 2,4% en pesos, que se amplió a un 7,9% al contemplar la inflación prevista para el mes, y que si se la mide por la evolución del dólar “contado con liqui” arrojó una caída del 10,9 por ciento.