El Gobierno dictó la conciliación obligatoria en el conflicto del sector aceitero y desactivó el paro que estaba previsto para comenzar este miércoles a las 6. La medida de fuerza amenazaba con detener la operatoria en las principales plantas agroexportadoras del país y frenar la liquidación de divisas que el Tesoro necesita para contener la pérdida de reservas.
El paro había sido convocado horas antes por la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina (FTCIODyARA) y el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) de San Lorenzo.
En un comunicado titulado “Huelga Nacional Aceitera”, ambas organizaciones habían anunciado que, ante la falta de acuerdo en la negociación paritaria, iniciarían medidas de fuerza conjuntas en todas las plantas aceiteras del país.
Los gremios fundamentaron su reclamo en “el derecho a un Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM) según su definición en el artículo 14 bis de la Constitución Nacional y artículo 116 de la Ley de Contrato de Trabajo”, y precisaron que ese ingreso debía asegurar “la satisfacción de las nueve necesidades allí contempladas: alimentación adecuada, vivienda digna, educación, vestuario, asistencia sanitaria, transporte, esparcimiento, vacaciones y previsión”.
Según los estudios citados por las entidades sindicales, “el valor del SMVM según su definición constitucional y legal es de $2.344.728 para el mes de septiembre de 2025”, cuando se abrió la revisión del acuerdo firmado el 9 de abril.