El Senado de la Nación aprobó el proyecto de Ley Bases con modificaciones, por lo que el texto vuelve a la Cámara de Diputados para su revisión. Si Diputados acepta las modificaciones, la ley queda sancionada y pasa al Poder Ejecutivo para su promulgación.
La Cámara de Diputados deberá ahora decidir si acepta las modificaciones del Senado o si insiste en su redacción original. El futuro de la Ley Bases dependerá de esta decisión y de la eventual intervención del Presidente de la Nación.
¿Qué puede hacer Diputados?
Aceptar las modificaciones: En este caso, la ley se sanciona y pasa al Presidente.
Insistir en la redacción original: Para esto, necesita la mayoría absoluta de sus miembros. Si lo logra, el Senado debe volver a votar el proyecto.
Aceptar algunas modificaciones y rechazar otras: Esta opción también es posible, según una interpretación de la Constitución Nacional.
¿Qué puede hacer el Presidente?
Promulgar la ley: Esto completa el proceso legislativo y la ley entra en vigencia.
Vetar la ley: El veto puede ser total o parcial. Si es parcial, puede promulgar la parte no vetada.
¿Qué pasa si hay veto?
El proyecto vuelve al Congreso, que puede aceptar el veto o insistir en su sanción con dos tercios de los votos. Si lo logra, la ley se promulga aunque el Presidente no esté de acuerdo. Si no, se mantiene el veto y el proyecto no puede volver a tratarse en las sesiones de ese año.
¿Cómo votaron los senadores?
La composición del voto de rechazo contra la ley Bases fue formada por el bloque Unidad Ciudadana, que conduce Juliana Di Tullio (Buenos Aires), y el Frente Nacional y Popular, que lidera José Mayans (Formosa).
Ambos conforman un interbloque de 33 senadores a los que se le plegó el bloque santacruceño, que integran José María Carambia y Natalia Gadano, y el radical Martín Lousteau (CABA).
En la vereda del frente, LLA logró aglomerar y sellar 36 voluntades, tras la maniobra de Carambia y Gadano que el martes dieron la sorpresa al romper el piso de 38 votos con el que contaba la Casa Rosada, ya que Lousteau ya había advertido que presentaría su propio dictamen, dejando en claro que votaría en contra del proyecto y defendería su propio texto en la sesión.
Los escaños que apoyaron a LLA vinieron por parte del radicalismo, que aportó 12 votos para la general; seis del PRO; tres de Cambio Federal; uno de Comunidad Neuquén, con la zigzagueante Lucila Crexell; dos del Frente Renovador de la Concordia; uno de Juntos Somos Río Negro; uno de Por la Justicia Social; tres de Unidad Federal; y los siete libertarios. A este número se le sumó el voto de Villarruel para llegar a los 37 contra los 36 opositores.
El Senado de la Nación aprobó el paquete fiscal con 37 votos afirmativos y 35 votos negativos e inició la votación en particular con varias modificaciones en marcha propuestas por el oficialismo y el foco puesto sobre el futuro de la restitución de la cuarta categoría de Ganancias.
Su debate inició a las 3 de la madrugada con el anuncio del dictamen de mayoría por parte del senador oficialista Ezequiel Atauche (Jujuy), miembro informante de La Libertad Avanza y titular de la comisión de Presupuesto y Hacienda.
A diferencia de la ley de Bases, que ya obtuvo la luz verde antes, la mayoría en favor del proyecto en general fue con el apoyo del senador Martín Lousteau (CABA). Los santacruceños José María Carambia y Natalia Gadano votaron de manera negativa y se plegaron a los 33 kirchneristas.
Si bien Lousteau aportó su voto positivo, aclaró que fue por pedido de los gobernadores correligionarios y fustigó: "Este Gobierno elige la austeridad y responsabilidad fiscal cuando mira a los jubilados, pero después opta por ser populista y degenerado fiscal con los más privilegiados".
Uno de los defensores férreos que tuvo el proyecto en la ronda de disertantes fue el senador y líder de Cambio Federal, Juan Carlos Romero (Salta), quien sostuvo que el paquete fiscal puede "brindar" estabilidad a la Argentina y, en su criterio, "ver si definitivamente" se termina "con la decadencia argentina”.
En esa misma línea fue el senador Francisco Paoltroni (Formosa), de La Libertad Avanza, que fue optimista con las acciones que podría ejecutar el presidente Javier Milei de concretarse la aprobación en particular de todo el proyecto. Para Paoltroni, Milei podría bajar impuestos y cerró con una frase llamativa: "Seremos potencia".
La votación en particular: duras derrotas para el Gobierno
En la votación en particular, la sorpresa la dio bienes personales. Tras aprobar por unanimidad el Régimen de Regularización de Obligaciones Tributarias, Aduaneras y de Seguridad Social, más el blanqueo de capitales, el título de bienes personales del dictamen de mayoría fue rechazado con 37 votos contra 35 positivos.
La restitución de la cuarta categoría del impuesto a las Ganancias ya tenía como destino la derrota. Fue por 41 votos negativos contra 31 positivos. Al oficialismo no le alcanzó con la exención del 22 por ciento dispuesta para las provincias de la Patagonia como carnada para abrochar más voluntades.