En la primera audiencia de juicio contra Gimena Antonia Núñez como autora de los delitos de falso testimonio y encubrimiento agravado en concurso real por el caso Cintia Fernández, que prestó declaración; lo hizo también Ana Fernández, madre de la víctima, el Procurador General, quien se desempeñaba como abogado querellante durante el juicio por el homicidio y una cuñada de Ana Fernández, quien la acompaño tras el hallazgo del cuerpo de su hija.
El fiscal penal 2, Ramiro Ramos Ossorio, representa al Ministerio Público Fiscal ante la Sala IV del Tribunal de Juicio del distrito Centro, en la audiencia de debate contra Gimena Antonia Núñez como autora de los delitos de falso testimonio y encubrimiento agravado en concurso real.
Tras la lectura de los requerimientos a juicio fiscal y de la querella, el abogado defensor realizó un planteo de nulidad parcial, el que se resolvió de manera negativa y al ser consultada, la acusada decidió prestar declaración ante el Tribunal sin responder preguntas y dio su versión de los hechos respecto de las dos acusaciones en su contra.
Al iniciar la ronda de testigos, declaró Ana del Valle Fernández, madre de Cintia Vanesa Fernández, quien rememoró lo vivido la noche del 3 de mayo de 2011 en el departamento de barrio Parque La Vega, sus intercambios con personal policial desde aquel momento y las distintas irregularidades que fue detectando a lo largo de la investigación y que la llevaron a cuestionarla y a realizar presentaciones judiciales.
A su turno, Pedro García Castiella, actual procurador general de Salta, prestó declaración como testigo de manera presencial y renunciando a toda prerrogativa, por su desempeño como abogado querellante de Ana Fernández durante la audiencia de debate.
En su declaración, García Castiella explicó que asumió como querellante en la causa cuando la investigación estaba avanzada, y destacó el estancamiento al que se había llevado a la causa durante la instrucción, con el sembrado de innumerables hipótesis falsas. Estas iban desde juegos sexuales, problemas psiquiátricos y aparente suicidio, hasta el involucramiento inclusive de un tercero inocente. Señaló que esto fue posible debido al antiguo sistema de instrucción y la liberalidad con la que la policía podía manipular la información que se proporcionaba al Juez de Instrucción. Aplaudió la implementación del sistema acusatorio en Salta y el trabajo de investigadores especializados bajo la supervisión de un Fiscal. Destacó que durante todo ese periodo de introducción de hipótesis confusas, Nuñez estuvo al frente de la investigación.
Conforme al relato del entonces abogado querellante, celebró la decisión del juez de Impugnación Abel Fleming, quien evitó que la causa quedara impune y permitió que se retomara la investigación para llevar a juicio a Mario Federico Condorí. También se refirió al desplazamiento de Nuñez de la dirección de las investigaciones, dispuesta por el Juez Pastrana, al advertir que había dispuesto diligencias que no habían sido autorizadas y que habrían servido a la estrategia para liberar de sospecha al condenado Condorí.
También señaló que Gimena Nuñez había omitido en sus informes aclarar que tres meses antes del hecho, había sido compañera laboral de Condorí en la misma División de Homicidios. Esta información se reconoció recién en la audiencia de debate y motivó su requerimiento por falso testimonio en aquella oportunidad por parte del fiscal Ramos Ossorio.
Se refirió extensamente a la acusación contra Gimena Núñez y a situaciones de omisión en los primeros pasos de la investigación que quedaron en evidencia durante el debate de 2019. En ese momento, no se relevaron testigos que tenían información valiosa en la escena del hecho, no se secuestró documentación que fue encontrada en el departamento de la víctima y se cometieron otros errores «groseros» que perjudicaron el avance de la causa. Se mencionó que, de no haber sido así, dicha causa podría haber sido resuelta en pocos meses y no en ocho años, como finalmente aconteció.
Por ultimo, declaró una cuñada de Ana Fernández, quien la acompañó de manera permanente tras el hallazgo de Cintia sin vida a realizar trámites y gestiones.