Una marcha de antorchas en Jujuy acrecienta el miedo del gobierno provincial a una posible escalada de violencia. La misma fue convocada frente a la Casa de Gobierno y desde temprano comenzaron a vallar la zona ante la posibilidad de nuevos disturbios.
Esta movilización fue confirmada tras los incidentes ocurridos el martes al mediodía entre manifestantes y la Policía luego de la aprobación de la reforma de tres artículos de la Constitución provincial.
Ante este posible escenario, el entorno de Gerardo Morales buscará seguir firme en la decisión y tratar de controlar las nuevas protestas.
La jornada de movilizaciones, que terminó en graves incidentes, dejó medio centenar de heridos, uno de gravedad, y al menos 50 detenidos.
Tras lo ocurrido, el gobierno provincial decretó asueto administrativo y escolar ya que varias instituciones se vieron vandalizadas: "Se hizo para pacificar las cosas porque por donde pasó esta gente rompieron todo", aseguró Alberto Bernis, vicegobernador.
Desde el miércoles por la mañana, y tras el conocimiento de esta nueva marcha, la casa de gobierno fue vallada y cientos de policías se centraron para impedir incidentes dentro del edificio, contrario a lo que ocurrió en la Legislatura donde tres salas fueron incendiadas después de la reforma.
En Capital Federal también habrá masivas protestas de diversos gremios y sindicatos en repudio de los hechos ocurridos hace algunas horas en la provincia del norte.
Por este motivo, desde el mediodía se espera que el Obelisco sea el lugar clave para la concentración, así como también la casa de Jujuy ubicada en Av. Santa Fe y Carlos Pellegrini.
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