Daniel Scioli suma y sigue en su afán de competir por la Presidencia de la Nación en las próximas elecciones. Está decidido a ir por la revancha de este año, tras la derrota que sufrió en el balotaje de 2015 frente a Mauricio Macri, y procura ganar musculatura política para pulsear con el kirchnerismo en las PASO de agosto.
El ex gobernador bonaerense y actual embajador argentino en Brasil está armando listas en todo el país, para disputar con candidatos propios los comicios que se avecinan en las distintas jurisdicciones nacionales. En esa nómina se incluye, lógicamente, la estratégica provincia de Buenos Aires, donde los planes de Scioli de abrir internas en cada uno de los 135 municipios genera por estas horas ruido y hasta cierta urticaria entre los intendentes peronistas.
Se trata de un escenario novedoso el que propone el sciolismo en ese distrito, donde las energías de los jefes comunales del Partido Justicialista (PJ) se enfocan hoy en tratar de alambrar sus territorios frente a la amenaza tanto de Juntos como de La Liberad Avanza, el espacio libertario que lidera Javier Milei y que divide por estos días en tres tercios el escenario electoral con vistas a la próxima convocatoria a las urnas.
Una de esas porciones corresponde al caudal de votos que obtendría el Frente de Todos (FdT), o como se termine llamando la alianza oficialista en los comicios de este año, de acuerdo con recientes encuestas. Dentro de la coalición gobernante, entre los precandidatos presidenciales confirmados hasta el momento (tres) Scioli es quien mejor mide, aunque claro, aún se esperan definiciones por el lado del kirchnerismo y del massismo.
La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner todavía no bendijo públicamente a "su" postulante para la Presidencia de la Nación. Sin embargo, todo indica que el elegido sería el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro. En tanto, resta conocerse también si el titular de la cartera de Economía, Sergio Massa, se postulará o no este año para la Jefatura de Estado: o mejor dicho, si los disparatados niveles de inflación que se registran en la Argentina se lo permiten.
Con una mayor exposición mediática, un perfil más alto en actividades públicas y una serie de pegatinas de afiches en las calles que lo promocionan, De Pedro se ha venido mostrando en los últimos días como un eventual precandidato presidencial. Mientras tanto, el kirchnerismo envía tiros por elevación presionando hacia dentro del FdT para que el oficialismo finalmente compita en las PASO con un único aspirante a la primera magistratura. Es decir, con un postulante de "consenso" o bien, designado "a dedo" por Cristina, la jefa del espacio político gobernante.