La Catedral Basílica de Salta se despide de una de sus figuras más emblemáticas y queridas. Tras 43 años de servicio, el campanero que dedicó su vida a mantener viva una de las tradiciones más arraigadas de la ciudad se retira. En una conversación con la prensa compartió sus reflexiones y sentimientos sobre este importante paso en su vida. Pepe Fernández, conocido por su devoción y compromiso, describió con cariño el impacto de su trabajo. "Se escucha hasta Cerrillos, a la hora que suena la campana a las 6:30 se escucha hasta ahí", comentó. Su voz se entrecortó al recordar cómo el sonido de la campana fue un vínculo espiritual para muchos. La campana de la Catedral no solo marca el tiempo, sino también los momentos importantes en la vida religiosa en Salta. "En la Catedral, las campanas suenan el primer jueves y el primer viernes, además los 13 de cada mes, en Semana Santa, Corpus Christi", explicó. Esta tradición, que une a los salteños en oración y reflexión, será recordada por el campanero como una parte fundamental de su vida.