En el hospital Juan Domingo Perón culminaron los trabajos de puesta a punto de dos nuevos servicios de alta complejidad como lo son los centros de diálisis y de oncología, ampliando la cobertura a una población de más de 240 mil personas. Además, se equipó la Unidad de Terapia Intensiva.
El ministro de Salud Pública Federico Mangione, destacó que a partir de la habilitación de nuevos servicios de alta complejidad en Tartagal, se sigue dando cumplimiento al propósito de federalizar la salud pública en Salta, tal como lo planteó el gobernador Gustavo Sáenz desde el inicio de su gestión.
En el nosocomio, se trabajó en la refuncionalización de un ala destinada exclusivamente al tratamiento de pacientes con insuficiencia renal.
El flamante servicio de diálisis cuenta con cuatro dializadoras “Fresenius 4008S”, cuatro sillones de los cuales uno funcionará en box aislado.
Para ello se dispuso una sala con instalación eléctrica específica para uso del equipamiento nuevo, una planta de tratamiento de agua (filtrado y purificación).
Centro de oncología y quimioterapia
Además del Centro de Diálisis, en Tartagal se habilitará el Centro de Oncología y Quimioterapia, que ya cuenta con todo el equipamiento requerido, el cual fue provisto por el Ministerio de Salud Pública de Salta.
El espacio físico del nuevo Centro fue preparado y acondicionado cumpliendo todas las normas que se establecen para la atención de pacientes oncológicos y con tratamiento de Quimioterapia.
Cuenta con dos sillones reclinables, bombas infusoras volumétricas “Mindray SK 600II”, cabina de bioseguridad para el preparado de medicamentos, heladera para la conversación de medicamentos, baños exclusivos para pacientes, box aislado con el objetivo de garantizar condiciones adecuadas.
Unidad de Terapia Intensiva
La Unidad de Terapia Intensiva (UTI) del hospital Juan Domingo Perón, también fue equipada con nueva aparatología con tecnología de punta, que le permitirá ampliar y optimizar este servicio sanitario esencial.
En el servicio se incorporaron tres monitores de signos vitales “Mindray modelo Umec 10”, que ya se encuentran instalados y permiten controlar saturación de oxígeno en sangre, actividad y frecuencia cardíaca, frecuencia respiratoria, presión arterial por medición no invasiva y temperatura corporal.
Con la incorporación de estos aparatos en la UTI, se alcanzan mejoras en la calidad de la atención y al brindar acceso inmediato a los signos del paciente, ayuda a fundamentar las decisiones clínicas, mejorar la eficiencia clínica y con ello mejorar los resultados.