El Kremlin acusó este sábado a Ucrania de haber arruinado una tregua al "rechazar las negociaciones", en el tercer día la invasión lanzada por el presidente Vladimir Putin contra el país vecino, pero el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, anunció una nueva instancia de negociación apoyada por Turquía y Azerbaiyan.
En el atardecer en Kiev, Zelenski afirmó que los presidentes de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, le propusieron en una conversación telefónica organizar negociaciones con Rusia sobre la crisis ucraniana.
"Aliyev y Erdogan se han ofrecido para organizar negociaciones con Rusia", dijo Zelenski en un mensaje de video, al saludar esa propuesta.
Agregó que agradeció a Erdogan su apoyo a la soberanía de Ucrania.
"Él y yo coincidimos en que en estos momentos es de suma importancia prohibir que los buques de guerra rusos crucen al mar Negro", indicó, según reprodujo la agencia de noticias rusa Sputnik.
Por otro lado, según Zelenski, el presidente azerbaiyano le prometió suministros de petróleo y derivados.
"Le dije al buen amigo de Ucrania Ilham Aliyev, presidente de Azerbaiyán, que a nuestro país le faltan petróleo y derivados, es complicado, pero ahora lo vamos a tener todo", aseguró.
El anuncio del presidente ucraniano se conoció luego de Rusia lamentara el fracaso de otras instancias de diálogo que estaban acordadas para este mismo sábado, y por las que Putin había ordenado una suspensión en el avance de las tropas.
"En consonancia con las negociaciones esperadas, el presidente ruso ordenó suspender el avance de las principales fuerzas" de las tropas de Moscú, afirmó el portavoz Dmitri Peskov al momento de anunciar la reanudación de esas operaciones debido al fracaso de las conversaciones, consignó la agencia de noticias AFP.
Esa afirmación fue refutada por un asesor de la Oficina Presidencial de Ucrania, que agregó que el país "está dispuesto a abrir negociaciones de alto el fuego pero no acepta un ultimátum", reprodujo la cadena británica Sky News.
El comunicado atribuyó la versión del Kremlin como "un intento de quebrantar a Ucrania y obligarla a aceptar condiciones categóricamente inaceptables".
Un difícil punto de inflexión
Los presidentes de Rusia y de Ucrania manifestaron el viernes sus intenciones de abrir una negociación que frene la ofensiva en marcha, pero el margen para el diálogo se fue achicando ante las acusaciones cruzadas, la retórica violenta en aumento y la continuidad de los enfrentamientos.
Zelenski, fue el primero en hablar de emprender las conversaciones "para detener la muerte de personas", tras la invasión militar que ya llegó a las calles de la capital Kiev.
Luego fue el vocero del Kremlin el que indicó que Putin también "está listo para enviar una delegación rusa a nivel de representantes de los Ministerios de Defensa y de Exteriores y la Administración presidencial para celebrar negociaciones con la delegación ucraniana", según declaraciones reproducidas por la agencia Sputnik.