Nancy Pelosi decidió aterrizar en Taipei, la capital de Taiwán. Desafió a las advertencias de China de evitar esa escala bajo la responsabilidad de Estados Unidos por las consecuencias que pueda tener esta aparición en suelo de Taiwán.
La presidenta de la cámara de Representantes de Estados Unidos incluyó pasar la noche en ese lugar en su viaje desde Malasia hacia Corea del sur, lo que eleva al peor momento la crisis de las relaciones entre su país y China.
Xi Jinping advirtió al Presidente de Estados Unidos, que “quien juega con fuego, invariablemente se quema”.
Rusia también se involucró en el conflicto y tomó partido por China. Para la cancillería rusa, la Casa Blanca lleva décadas en las que solo ha complicado las relaciones internacionales y señala que esta visita a Taiwán es otra provocación más. Nancy Pelosy fue recibida por el canciller de China nacionalista.
Vibrante democracia en Taiwán
Mientras la televisión mundial transmitía en directo la llegada del avión con Nancy Pelosi, así como su descenso por la escalerilla, el saludo del canciller taiwanés y un saludo de la "vocera" de la Cámara de Representantes, la legisladora subió inmediatamente en su cuenta oficial de Twitter un comunicado oficial.
Esta visita es la primera visita oficial a Taiwán de un presidente de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos en 25 años y Pelosi fue muy clara en su escrito.
“La visita de nuestra delegación del Congreso a Taiwán honra el compromiso inquebrantable de Estados Unidos de apoyar la vibrante democracia de Taiwán", dice el comunicado oficial.
Luego de darla como un paso más en su viaje por Singapur, Malasia y a continuación por Corea del Sur y Japón, define la escala en Taiwán de esta manera. "La solidaridad de Estados Unidos con los 23 millones de habitantes de Taiwán es más importante hoy que nunca, ya que el mundo se enfrenta a una elección entre la autocracia y la democracia".
Tanto esa línea como la parte final del mensaje parece estar destinado a causar gran impacto en las autoridades de China comunista. "Estados Unidos continúa oponiéndose a los esfuerzos unilaterales para cambiar el statu quo”. Es una clara alusión a las reiteradas amenazas de la República Popular China de anexar, tarde o temprano, a Taiwán a su territorio. Incluso mediante la fuerza.
Nancy Pelosy llega a Taiwán horas después de una escalada en la tensión entre China Y Estados Unidos. El Ministerio de Relaciones Exteriores chino ha emitido un extenso comunicado en el que condena la visita, la cual “envía un mensaje erróneo sobre la independencia de Taiwán a las fuerzas separatistas”. La Cancillería reitera que “solo hay una China en el mundo, y Taiwán es parte inalienable de ella”.
El presidente Joe Biden aún no hizo comentario alguno sobre la llegada de Nancy Pelosi a Taiwán, pese a las advertencias hechas por el propio Xi Jinping.