España vuelve a eliminar la obligatoriedad del uso del tapabocas en exteriores después de que ya da por superado el pico de contagios provocados por la variante Ómicron. Aunque el país sigue registrando datos altos de positivos, las tasas bajas de mortalidad y la alta vacunación han alentado esta decisión.
Un nuevo panorama se observará en las calles españolas a partir de este 10 de febrero. Los transeúntes no llevarán mascarilla para protegerse contra el virus. Y es que el Ejecutivo español levantó las restricciones relacionadas con el uso obligatorio del tapabocas.
A decir de la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, “esta vez sí, los niños y niñas podrán estar jugando en el patio del colegio, en los recreos, sin mascarillas”. Las declaraciones fueron dadas en una rueda de prensa desarrollada luego de que el Consejo de Ministros autorizara liberar el uso de la mascarilla.
Sin embargo, el uso del elemento sanitario protector deberá aplicarse en eventos multitudinarios en los que se esté de pie o, si se está sentado, no se pueda mantener una distancia de 1,5 metros, según medios de prensa.