La alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, aseguró que tanto Ucrania como Rusia cometieron violaciones a los derechos humanos en el contexto del conflicto bélico que mantienen desde febrero de este año y advirtió que si bien se contabilizaron "más de 10.000 muertos o heridos civiles en Ucrania, con 335 niños", las cifras "probablemente sean considerablemente más altas".
También instó a ambos bandos a proporcionar acceso confidencial sin trabas a su oficina y a observadores independientes en todos los lugares de detención.
"Si bien todavía debemos tener acceso a los territorios ocupados por las fuerzas rusas hemos documentado que ambas partes han cometido violaciones de las normas internacionales de derechos humanos y del derecho humanitario internacional (DIH)", explicó Bachelet en el último informe sobre la situación en Ucrania publicado por su oficina en su página web.
Los hallazgos se basan en información recopilada por la Misión de Monitoreo de Derechos Humanos de la ONU en Ucrania durante 11 visitas de campo, recorridas en tres lugares de detención y 517 entrevistas con víctimas y testigos de violaciones de derechos humanos, entre otras fuentes de información.
De acuerdo con el texto, hasta el 3 de julio se documentaron "más de 10.000 muertos o heridos civiles en Ucrania, con 335 niños entre los 4.889 muertos documentados", y la mayoría de los decesos ocurrieron en ataques con artillería pesada en zonas pobladas.
"Hago hincapié en que las cifras reales probablemente sean considerablemente más altas", aclaró Bachelet.
Asimismo, explicó que "la ubicación de objetivos militares cerca de bienes civiles y el uso de escudos humanos por ambas partes en el conflicto, como se documenta en el caso de una residencia de ancianos en Stara Krasnianka, en la provincia de Lugansk, por ejemplo, también suscitan preocupación".
En el informe se subrayó la alarma por los "homicidios ilegítimos, incluidas las ejecuciones sumarias".
De acuerdo con los datos publicados, al 15 de mayo se recuperaron más de 1.200 cuerpos de civiles solo en la región de Kiev y su oficina trabaja en más de 300 denuncias de asesinatos por parte de las fuerzas armadas rusas en situaciones no vinculadas a combates activos.
Además, se contabilizaron 270 casos de detención arbitraria y desaparición forzada, de los cuales ocho de las víctimas fueron encontradas muertas.
En el texto también se remarcó la violación del derecho a la libertad de expresión y se hizo alusión a la muerte de 17 periodistas, trabajadores de los medios y blogueros a causa de las hostilidades, además de 14 periodistas heridos.
Por otra parte, la oficina de la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos verificó 28 casos de violencia sexual relacionada con el conflicto, incluidos casos de violación, violación en grupo, tortura y desnudos públicos forzados.
También se registraron daños o destrucción en más de 400 instalaciones médicas y educativas y en miles de casas.