Los países que componen el G7 se comprometieron a reducir, prohibir o eliminar las importaciones de petróleo ruso de forma "gradual" para "golpear" económicamente al gobierno de Vladimir Putin por la guerra en Ucrania.
En un comunicado, la Casa Blanca explicó que los países más industrializados dejarán de comprarle a Rusia producto "de manera oportuna" y "ordenada" con tiempo para que el mundo encuentre vías de suministro alternativas.
"Esto implicará un duro golpe a principal la arteria de la economía del (presidente ruso Vladimir) Putin y le negará los ingresos que necesita para financiar su guerra", agregó el gobierno del presidente Joe Biden, según informó AFP.
El "grupo de los siete" está compuesto por Francia, Alemania, Canadá, Italia, Japón, Gran Bretaña y Estados Unidos, aunque en la comunicación no se especificó cuál fue el acuerdo alcanzado por los distintos integrantes.
La decisión llega luego de que los países de la Unión Europea no pudieran llegar a un consenso para restringir las importaciones del insumo energético ruso, por las dificultades que plantea para algunos socios su dependencia del crudo de Moscú.
En otro comunicado, el G7 acusó a Rusia de haber violado “el orden internacional” concebido tras la Segunda Guerra Mundial con la guerra “no provocada” con Ucrania.
“Rusia violó el orden internacional basado en normas, en particular la Carta de la ONU, concebida después de la Segunda Guerra Mundial para salvar a las generaciones sucesivas del flagelo de la guerra”, dijo el documento.
“Nos mantenemos unidos en nuestra determinación de que el presidente Putin no debe ganar su guerra contra Ucrania”, advirtió el G7, y agregó que la invasión trajo “vergüenza a Rusia y a los sacrificios históricos de su pueblo”.
El G7 se reunió hoy por videoconferencia y participó del encuentro el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski.
La fecha del encuentro resultó simbólica, pues Europa conmemora el 8 de mayo el fin de la Segunda Guerra Mundial y Rusia celebra el 9 de mayo la victoria de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi.
Los aliados occidentales de Ucrania mostraron hasta ahora una coordinación muy aceitada al anunciar sanciones a Rusia. Sin embargo, esas medidas no avanzan al mismo ritmo en relación con la compra de petróleo e hidrocarburos rusos.