Una fuerte explosión sorprendió a los madrileños que circulaban por el barrio de Salamanca. Por la mañana, se produjo un estallido en un edificio que se encontraba en refacciones, lo que causó como saldo dos personas muertas y 18 heridos, dos de gravedad.
Las dos víctimas mortales, de 21 y 27 años, son los dos operarios que permanecían desaparecidos inicialmente tras el estruendo y cuyos cadáveres fueron encontrados horas más tardes. Ambos trabajaban en el tercer piso en el momento del suceso. Una de las atendidas es la mujer de uno de los operarios, que debió ser tratada por los psicólogos de los servicios de emergencias por una fuerte crisis de ansiedad.
Según vecinos del lugar antes del hecho había un fuerte olor a gas y minutos después el edificio explotó. Para extremar cuidados y atender de manera rápida a los heridos los servicios de Emergencias instalaron un hospital de campaña en donde se atendió a los heridos leves, mientras que cuatro fueron derivados a los hospitales más cercanos por la gravedad de sus heridas, entre ello una persona mayor que se tiró de un segundo piso.
“Hay una persona que también está siendo objeto de traslado porque como consecuencia de la explosión ha sido lanzado a un patio anexo del edificio y se le acaba de localizar. Se está haciendo la valoración por parte del Samur de su estado de salud” explicó el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, desde el lugar.
Otra hipótesis que manejan las autoridades es la posibilidad de que el hecho se haya generado por la explosión de una caldera ubicada en el último piso del edificio que tiene cuatro plantas en total.
El edificio que estaba en reparación sufrió graves daños y viviendas cercanas también. Los edificios aledaños fueron evacuados ante alguna posibilidad de derrumbe y los vecinos recién podrán regresar a sus hogares cuando el lugar esté en optimas condiciones.
Hasta el momento la policía realizó un perímetro en los alrededores de la explosión para controlar y asegurar la zona.