Fuertes combates se registraron en la planta Azovstal, el último bastión de la resistencia ucraniana en Mariúpol. El alcalde de la ciudad portuaria, Vadym Boichenko, ratificó que aún no logran restablecer la comunicación con las tropas de su país que han resistido al interior junto a cientos de civiles. Fuentes militares rusas confirmaron previamente ataques contra posiciones ucranianas en la acería, pero el Kremlin negó este miércoles que sus tropas estuvieran asaltando Azovstal.
71 días han transcurrido desde que el presidente ruso Vladimir Putin lanzó la guerra contra Ucrania y en una sesión extraordinaria, el Parlamento Europeo intenta acordar el que sería hasta ahora el mayor golpe financiero contra el Kremlin: la prohibición de todas las importaciones de petróleo ruso.
Mientras la diplomacia intenta presionar por el fin del conflicto, las tropas de Moscú siguen bombardeando distintas zonas del país y las fuerzas armadas de su aliada Belarús iniciaron repentinos simulacros de combate a gran escala.
El Ejército de Ucrania resiste y su Gobierno urge por más ayuda militar y las evacuaciones de civiles.
Las fuerzas rusas habrían entrado en las últimas horas en la planta siderúrgica Azovstal, una enorme fábrica de 11 km en Mariúpol, el último bastión donde han resistido alrededor de 2.000 soldados ucranianos junto a cientos de civiles en esa ciudad del este de Ucrania.
"Los intentos de asaltar la planta continúan por segundo día. Las tropas rusas ya están en el territorio de Azovstal", aseguró en un comunicado el jefe de la facción parlamentaria gobernante de Ucrania, David Arakhamia.
El alcalde de Mariúpol, Vadym Boichenko, informó que se registraron fuertes combates en la acería y que las autoridades ucranianas perdieron contacto con sus tropas refugiadas allí.
“Hoy hay fuertes batallas en el territorio de nuestra fortaleza, en el territorio de Azovstal. Nuestros valientes están defendiendo esta fortaleza, pero es muy difícil porque la artillería pesada y los tanques están disparando por toda la fortaleza; la aviación está funcionando, los barcos se han acercado y también están disparando contra la fortaleza”, afirmó Boichenko.
Fuentes militares rusas citadas por Reuters habían confirmado que estaban atacando posiciones ucranianas en esa acería con “artillería y aviones”, pero el Kremlin negó hoy que sus fuerzas estuvieran atacando Azovstal.
Tras las evacuaciones de esta semana, Kiev informó que en el lugar aún permanecían alrededor de 200 civiles, incluidos 30 niños.