Antes del 31 de julio, la Argentina debe abonar más de 2600 millones de dólares al Fondo Monetario Internacional (FMI) y las reservas para afrontar ese compromiso se encuentran al límite. Por eso, las negociaciones con el Gobierno se extendieron bajo el objetivo de alcanzar un entendimiento. Sin embargo, mientras se trata el caso argentino en los últimos diez días casi una docena de países obtuvieron acuerdos con el organismo multilateral de crédito.
La Argentina está en una instancia decisiva en la discusión con el Fondo porque en agosto el organismo entraría en receso y el directorio suele demorar unas dos semanas en tratar cada caso para lugar dar el visto bueno que permita gatillar los desembolsos para robustecer las reservas. En este contexto, la alternativa más sólida por el momento es que la Argentina vuelva a pagar los vencimientos de julio con yuanes, como lo hizo el mes anterior.
La portavoz del FMI, Julie Kozack, se refirió a esta particularidad la semana pasada y aclaró que el renminbi es una de las cinco monedas que el Fondo tiene habilitadas como medio de pago dentro de sus países miembro.
En paralelo, en las últimas dos semanas, el FMI sí aprobó las presentaciones de alrededor de diez naciones con las que mantiene acuerdos, de acuerdo con lo que publicó Clarín. Entre esos países se encuentra Bostwana, Zambia, Pakistán, Níger, Bahrein, Islas Marshall, República Dominicana y Mozambique. El FMI le dio luz verde a todos y, se estima, que desembolsó alrededor de US$1500 millones.
Cómo sigue la negociación del FMI con la Argentina
Las negociaciones con el FMI siguen en un estado de alta tensión. En los últimos días hubo conversaciones entre los integrantes del equipo económico con directores del Fondo y se barajó la posibilidad de viajar a Washington para cerrar el acuerdo.
Una de las últimas posibilidades arrojaba que una comitiva -integrada por los funcionarios Gabriel Rubinstein, Leonardo Madcur y Lisandro Cleri- podría viajar el lunes y el viernes podría sumarse Sergio Massa.
Todo indica que tras las conversaciones entre el ministro de Economía y la titular del FMI, Kristalina Georgieva, hubo importantes avances hacia un acuerdo en la reformulación del pago de la deuda que la Argentina tiene con el organismo internacional. La intención del Gobierno es firmar el acuerdo técnico el próximo viernes, a nivel del staff del organismo.
Para la Argentina es clave cerrar un nuevo entendimiento con el FMI por dos motivos. Por un lado porque el país tiene reservas negativas por US$6500 millones y necesita US$2600 millones para pagarle al FMI a fin de mes, sumado a otros US$800 millones a abonar a principios de agosto.
Por otro lado, Massa siempre se presentó como el garante del orden y la estabilidad económica. Pero la semana que terminó, el dólar blue trepó a $522 y también el CCL alcanzó los $540. Es decir, los mercados comenzaron a oler, además de la incertidumbre política, otra de carácter financiero, que se deriva de la postergación del acuerdo con el FMI.