A Boca se le escurrió otra vez la séptima Copa Libertadores de los dedos. Aunque forzó el alargue contra Fluminense, no pudo vulnerarlo nuevamente después del golazo de Luis Advíncula y cayó por 2-1 en el estadio Maracaná, gracias a los tantos de Germán Cano y John Kennedy. Y luego de la frustración en Río de Janeiro, el plantel del Xeneize ya está de regreso en la Argentina, dado que lo espera un compromiso complejo a pocos días de perder la final.
Los futbolistas arribaron a Ezeiza cerca de las 19 de ayer, y fueron recibidos por cientos de hinchas que colmaron el aeropuerto y sus alrededores para demostrarles su apoyo tras el sueño frustrado. Pero eso no fue todo, porque en el retorno al predio también sucedió lo mismo: cientos de fanáticos se reunieron allí para alentarlos.
Minutos más tarde una noticia volvió a sacudir a Boca: Jorge Almirón renunció como director técnico del equipo. Sus flojos números -apenas tres victorias (Platense, Central Córdoba y Unión) durante el tiempo regular de los últimos 20 partidos- ya lo ponían en tela de juicio. Para colmo, el clima del vestuario tras el pitazo de Wilmar Roldán se tornó tenso y caliente. Según se supo, hubo reproches de los jugadores al ex DT por el planteo con el que Boca salió a la cancha, sobre todo en el primer tiempo, y las extrañas modificaciones que realizó en el complemento. De hecho, el enojo de Nicolás Figal al ser reemplazado por el paraguayo Bruno Valdez quedó en evidencia frente a las cámaras de la transmisión oficial. Debido a todo esto y con la caída consumada, el ex entrenador del club decidió ponerle fin a su ciclo.
Por otra parte, la preocupación más cercana, además de la búsqueda de un nuevo técnico, estará puesta en la clasificación a la Copa Libertadores del 2024, a la que todavía no se metió. En este sentido, el próximo miércoles a las 19 horas deberá afrontar un compromiso clave en pos de lograr una misión que se volvió lejana tras la caída en el Maracaná: el clásico ante San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro. Con pocos días de entrenamiento y la tristeza como protagonista de las emociones, el plantel xeneize tendrá que buscar la victoria frente a un Ciclón que también quiere el mismo objetivo y hasta mantiene las mismas vías de entrada al certamen más importante de América.
Cómo se puede clasificar Boca a la Copa Libertadores 2024
Ganar la Copa de la Liga 2023 (se ubica décimo en la Zona B, a seis puntos del último lugar de clasificación a cuartos de final)
Terminar entre los 4 primeros de la tabla anual (Si bien se meten los tres del podio, River liberará un cupo porque se clasificó al salir campeón de la Liga Profesional).
Ganar la Copa Argentina 2023 (está en la semifinal del certamen, en la que enfrentará a Estudiantes de La Plata).