En un plazo poco común en la Justicia, el juez federal Daniel Rafecas recibió la denuncia sobre presuntas irregularidades en la licitación del Gasoducto Néstor Kirchner, e inmediatamente ordenó procedimientos en IEASA, Enargas y la Secretaría de Energía para obtener documentación vinculada a los hechos. Además, dispuso una ronda de testigos para manejar información técnica respecto de las necesidades en la extracción y transporte de volúmenes de gas.
Fue así que antes de que se cumpliera una semana desde que el presidente Alberto Fernández le pidiera la renuncia a Matías Kulfas, el exministro de Desarrollo Productivo debió presentarse en los Tribunales de Comodoro Py para explicar por qué había dicho lo que dijo acerca de los pormenores para la construcción del gasoducto. En su testimonial negó tener conocimiento de algún acto de corrupción y justificó sus declaraciones como parte de una interna política.
Según la agenda del tribunal, este lunes continuará declarando Antonio Pronsato, extitular de la Unidad Ejecutora de Enarsa a cargo del proyecto del Gasoducto, quien hace 15 días renunció en disconformidad con los retrasos de la obra. Los días siguientes se realizarán dos audiencias: mañana con expertos de las empresas extractoras de gas, y el miércoles otros cuatro idóneos en transporte de gas, designados por TGS y TGN (Transportadora Gas del Norte y del Sur), el ENARGAS y la Facultad de Ingeniería de la UBA.
Muchos coinciden en que el apuro en el trámite busca determinar en el plazo mínimo posible si hubo o no delito. Fuentes ligadas al caso le confiaron a A24.com que el juez Rafecas “tiene plena conciencia de la importancia estratégica de esta obra”, por lo que se podría presumir que en pocas semanas tomará una determinación.
¿Qué podría pasar con la causa?
En Comodoro Py destacan la velocidad en la instrucción de la causa por sospechas de corrupción en la construcción del gasoducto de Vaca Muerta (bautizado Néstor Kirchner), basadas en las denuncias del abogado Santiago Dupuy de Lome, los diputados Graciela Ocaña y Waldo Wolf, y Yamil Santoro, de la Fundación Apolo.
Incluso el fiscal federal del caso, Carlos Stornelli, resaltó “la celeridad con la que actuó el doctor Rafecas en orden a preservar la prueba”. Aún no sumó requerimientos al proceso y advirtió que “si está todo en orden, nadie tendrá que preocuparse”.
En principio se investigan los posibles delitos de incumplimiento de los deberes de funcionario publico y abuso de autoridad. Resta saber si el magistrado o el fiscal consideraran necesario convocar más testigos o pedir más medidas de prueba.
El próximo paso sería definir si existe motivo suficiente para determinar una acción penal. Si se mantiene este rumbo, el juez podría clausurar la causa. En caso contrario, los eventuales imputados serían llamados a indagatoria, y el expediente seguiría su curso.
El protagonismo de Matías Kulfas
El exministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, declaró por casi dos horas respondiendo a todas las preguntas del juez Rafecas y el fiscal Stornelli.
Había llegado a los tribunales 20 minutos antes de las 10, acompañado por un grupo de abogados, quienes no pudieron participar de la audiencia por su condición de testigo.
Cuando se retiró del juzgado, ubicado en el tercer piso de Comodoro Py, corrió hasta el ascensor con escolta policial, y antes de llegar a la planta baja se cambió al elevador de la otra punta del edificio, intentado esquivar a la prensa que bajaba raudamente las escaleras con la intención de entrevistarlo.
No hubo caso, porque al salir por la puerta lateral, algunos cronistas lo abordaron grabador en mano, aunque sus únicas palabras fueron “no hago declaraciones”. Se subió al auto que lo esperaba con el motor en marcha y se fue.
Más tarde se supo que Kulfas negó reiteradamente tener conocimiento de posibles delitos relacionados con la construcción del gasoducto Néstor Kirchner. A su vez, aclaró que sus expresiones, tanto en “off the récord” como en público, no fueron más que discrepancias políticas.
Respecto a las posibilidades de que otras empresas nacionales participen en el gasoducto, especificó que eso recién sería en el futuro, y que la adjudicación a la firma Techint está justificada en la premura de contar cuanto antes con la obra terminada.
De acuerdo a los textuales de la testimonial, a la que tuvo acceso A24.com, Kulfas dijo: "Lo primero que tengo que manifestar es que, en ningún momento, quise señalar o hacer mención a actos de corrupción”.
Aportó un pendrive con las grabaciones de las notas registradas en las radios, AM 750 y FM La Patriada, en las que hizo referencia a las manifestaciones de la vicepresidenta Cristina Fernández en el acto por los 100 años de YPF.
En este sentido, precisó que “el Ministerio de Desarrollo Productivo no tuvo una intervención directa en cuanto a las características técnicas de la licitación, sobre las cuales, naturalmente, no puedo opinar, porque no las conozco”.
Finalmente, el exministro Kulfas agregó que “dicha situación, generó un malestar muy importante dentro de las máximas autoridades del gobierno, y me pareció pertinente presentar mi renuncia, para descomprimir una situación de tensión política”.