El Banco Central volvió a subir la tasa de interés de referencia y la llevó al 44,5% anual. Se trata de la tercera oportunidad en el año en que el BCRA sube la tasa de sus instrumentos de deuda, las Leliq. El 6 de enero, tras haber estado más de un año sin ningún movimiento, la había subido del 38% al 40%; el 17 de febrero dispuso otro movimiento del 40% al 42,5%.
La nueva tasa de referencia implica que se eleven también las tasas para plazos fijos para personas físicas, cuyo nuevo piso será de 43,5% anual para los depósitos a 30 días hasta 10 millones de pesos, lo que representa un rendimiento de 53,3% de tasa efectiva anual (TEA).
“Para el resto de los depósitos del sector privado la tasa mínima garantizada se establece en 41,5%, lo que representa una TEA de 50,4%. Las tasas de interés activas se mantienen en niveles favorables, en especial para la inversión y la producción, y el sector MiPyME. Adicionalmente, el BCRA seguirá regulando ciertas tasas claves para el consumo de las familias”, señaló el BCRA en un comunicado.
La única mención del comunicado del BCRA a los elevados índices de inflación señaló que “la economía mundial enfrenta un shock de oferta que se traduce en subas de los precios” de todas las commodities, materias primas e insumos que afectan directa e indirectamente a los precios en la Argentina. “El Gobierno nacional se encuentra desarrollando medidas tendientes a mitigar el impacto en los precios locales de este shock internacional”, concluyó el BCRA.
La decisión del Banco Central se enmarca en dos factores bien marcados: el primero es la disparada que el Índice de Precios al Consumidor mostró en sus últimos tres registros: 3,8% en diciembre, 3,9% en enero y 4,7% en febrero. El segundo, es el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que incluye como uno de los compromisos centrales para alcanzar las metas monetarias y financieras que los depósitos tengan tasas reales positivas, es decir, que tengan un rendimiento superior al de la inflación.