El sindicato de Camioneros pidió aplazar hasta el viernes a las 12.30 una audiencia de paritarias con las tres cámaras patronales del transporte de cargas por automotor, con el objetivo de explorar la posibilidad de un acuerdo salarial antes de esa fecha en el ámbito privado. Tanto el Gobierno como los negociadores de ambas partes reconocieron la inminencia de un entendimiento que será por un plazo menor al año habitual de vigencia y que, de incluir cuotas, el gremio pedirán que su condición sea acumulativa, tal como adelantó este diario. La discusión arrancó la semana pasada, dos meses antes de culminar la vigencia del acuerdo paritario anterior, con un horizonte de inflación anual de 140% esgrimido por la organización que lideran Hugo y Pablo Moyano como reclamo central.
Los Moyano consiguieron un primer triunfo en la conversación con Fadeeac, Faetyl y Catac al convalidar el fin por anticipado de la paritaria del año pasado, con vigor en los papeles hasta octubre. Cualquiera sea el arreglo de aumento salarial tendrá carácter retroactivo al 1 de agosto, confirmaron en el gremio. A cambio, los empresarios demandaron poner en el acta final una garantía de que una eventual suma fija salarial ordenada por el Gobierno no tendrá efecto sobre las escalas de los choferes. Ayer en una entrevista Pablo Moyano devolvió gentilezas: dijo que esa medida reclamada a Sergio Massa deberá tener efecto sobre los trabajadores con sueldos más bajos y no para los representados por los sindicatos con mayor poder de negociación.
La apertura por adelantado de la paritaria camionera coincidió con el fogonazo inflacionario que derivó de la devaluación de más de 20% dispuesta por el Gobierno al día siguiente de las PASO que favorecieron a Javier Milei como el candidato presidencial más votado. En simultáneo, aunque estaba previsto en su primer acuerdo del año, la Asociación Bancaria se presentó ante el Ministerio de Trabajo para pedir la revisión de sus escalas salariales. El gremio de Comercio también demanda una actualización de sus sueldos. En tanto que la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), que acordó con varias cámaras patronales un ajuste trimestral de 42,6% en las ramas más extendidas de su convenio colectivo, está en pleno conflicto con el Grupo Techint para aplicar ese mismo aumento en la actividad siderúrgica.
El cuarto intermedio pedido ayer por Camioneros hasta el viernes ante el Ministerio de Trabajo para facilitar las conversaciones en privado no es novedoso. En la última década la casi totalidad de acuerdos salariales son cerrados en persona por Hugo Moyano con los presidentes de Fadeeac, Faetyl y Catac, incluso los últimos de ellos sin la presencia de Pablo, su lugarteniente y cosecretario general de la CGT. Es que la dinámica de negociaciones no estuvo ajena al distanciamiento entre padre e hijo fundada, sobre todo, en la preeminencia de la figura de Liliana Zulet, esposa de Hugo, en todos los emprendimientos relacionados con el sindicato, en particular la obra social que gerencia una empresa que controla la primera dama del gremio.
Camioneros confirmaron que los números gruesos del acuerdo están resueltos y resta por definir detalles menores. Entre otros puntos está acordado que la duración será menor a un año, aunque evitaron precisar si será por un trimestre, por cuatro meses o semestral. En cualquier caso la revisión de esos parámetros ocurrirá con una elección nacional definida.