Como todos los años, con la entronización de las imágenes del Señor y Virgen del Milagro, comenzó el tiempo del Milagro en la provincia, la fiesta más importante para la feligresía católica salteña, que finalizará el 15 de setiembre con la renovación del Pacto de Fidelidad.
Durante la ceremonia monseñor Mario Cargnello destacó la particularidad que tendrá la fiesta del Milagro este año y es recuperar la presencialidad, ya que en los dos años anteriores las actividades fueron distintas por la pandemia. "Celebrar el Milagro nos recuerda que somos caminantes y los fieles aportan año a año novedades que nos asombran, como así también generosidades. No podemos no resignificarlo al Señor y la Virgen del Milagro, a partir de ese fenómeno del pueblo que no manejamos los curas, porque el fenómeno son los peregrinos".
Cargnello destacó el rol de los peregrinos y pidió que miren su sacrificio, fe y entrega y que no queden sólo en un hecho folklórico que da color a la fiesta del milagro, sino como verdaderos testimonios de vida y fe.