Diez palestinos murieron y más de 80 resultaron heridos a balazos en una incursión militar israelí en Naplusa, en la Cisjordania ocupada. Lo informó la Autoridad Nacional palestina.
Además de un adolescente de 16 años, nueve hombres de 23 a 72 años murieron durante el ataque dijo el Ministerio de Salud palestino. La Yihad islámica señaló que uno de los comandantes locales de su brazo militar figuraba entre los muertos.
Al menos 82 personas fueron hospitalizadas por heridas de bala en diferentes centros asistenciales de esa ciudad palestina. Algunos de los heridos están graves, dijo el ministerio en un comunicado.
Las fuerzas israelíes realizan desde hace casi un año operaciones presentadas como “antiterroristas” en busca de “sospechosos” en el norte de Cisjordania, particularmente en las ciudades de Yenín y Naplusa, bastiones de grupos armados.
El ejército israelí, consultado por periodistas extranjeros, dijo que no tenía “ninguna información para dar” sobre la operación militar, reportó AFP.
Las fuerzas israelíes solo indicaron que estaban llevando a cabo una operación en Naplusa, pero sin dar más detalles.
Se trata de la incursión más sangrienta en Cisjordania desde por lo menos 2005. El balance de muertos es similar al del 26 de enero en Yenín, también en el norte de Cisjordania, donde 10 palestinos fallecieron, entre ellos varios combatientes.
Un periodista palestino resultó herido en la incursión militar israelí
En medio de su retirada, soldados israelíes lanzaron granadas de gas lacrimógeno en dirección a jóvenes palestinos que tiraban piedras contra vehículos militares y quemaban neumáticos.
En tanto, un periodista de Palestine TV, Mohammed Al Jatib, resultó herido en la incursión, informó un reportero de esa cadena de televisión.
Una multitud se reunió en la ciudad, incluidos hombres armados, para el funeral. “Las autoridades de ocupación y el gobierno israelí de extrema derecha son responsables de esta horrible masacre”, declaró Saeed Abu Ali, secretario general adjunto de la Liga Árabe para Asuntos Palestinos.
Jordania, el vecino, hizo un llamado a la calma y dijo que trabajará “de manera intensa con todas las partes” para poner fin a la escalada de violencia.
Desde Nueva York, el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, exigió que ya no se construyan asentamientos israelíes en territorios palestinos ocupados. “Cada nuevo asentamiento es otro obstáculo en el camino hacia la paz”, dijo.
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