Jair Bolsonaro no se rinde. Su Partido Liberal (PL) pidió a la Justicia electoral brasileña que anule los votos de unas 280.000 urnas usadas en el balotaje del 30 de octubre, alegando supuestos errores que le hubieran dado la victoria frente al mandatario electo, Luiz Lula da Silva.
Se trata de poco menos del 50 % de las urnas electrónicas utilizadas por el Tribunal Superior Electoral (TSE) en el segundo turno.
”Se requiere que sean invalidados los votos respectivos a las urnas electrónicas en que fueron comprobadas disconformidades irreparables de funcionamiento y que se determinen las prácticas y jurídicas debidas consecuencias con relación al resultado de la segunda vuelta de las elecciones”, explica la denuncia firmada por el abogado Marcelo Bessa.
El partido de Bolsonaro alega un “mal funcionamiento” de cinco modelos de urnas, supuestamente demostrado en un informe técnico realizado por el Instituto Voto Legal, contratado por la propia formación, que “tendría en jaque la transparencia del proceso electoral”.
El presidente del Tribunal Superior Electoral, Alexandre de Moraes, respondió a la solicitud cuestionando que las urnas objetadas fueron empleadas tanto en el balotaje como en la primera vuelta del 2 de octubre. ”Bajo pena de rechazo (de la demanda), el autor debe agregar un pedido para que se abarquen ambas vueltas de las elecciones, en un plazo de 24 horas”, dijo Moraes en su decisión.
Valdemar Costa Neto, líder del Partido Liberal del presidente Jair Bolsonaro, habla durante una conferencia de prensa sobre una investigación realizada por el partido que señala inconsistencias en las máquinas de votación utilizadas en las elecciones generales, en Brasilia, Brasil, martes 22 de noviembre de 2022. Bolsonaro impugna su derrota en las elecciones de octubre y pide a la autoridad electoral que anule los votos emitidos en más de la mitad de las máquinas de votación electrónica utilizadas. (Foto AP/Eraldo Peres)
La denuncia se refiere a unas 280.000 urnas usadas en las elecciones y que corresponden a modelos anteriores a 2020. ”Las inconsistencias no permiten comprobar el voto del elector. Eso no quiere decir que hubo fraude, sino que no hay seguridad de que las urnas sean creíbles”, dijo Bessa en rueda de prensa en Brasilia.
Además, aseguró que en los antiguos modelos de urnas Lula obtuvo una ventaja próxima de cinco puntos, mayor al resultado oficial de 50,9% contra 49,1%.
Con la anulación de los votos de urnas cuestionadas, el partido de Bolsonaro sostiene que el actual presidente obtendría la reelección “con 51,05% de los votos válidos contra 48,95% de Lula”.
Bolsonaro se ha mantenido en silencio desde que perdió la reelección por un estrecho margen de 2,1 millones de votos ante el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva.
El dirigente ultraderechista no reconoció el resultado, pero autorizó la transición de poder. En su cuenta de Twitter se sigue presentando como “candidato a la reelección”.
Bolsonaro citó “la indignación” y “el sentimiento de injusticia” de sus seguidores, que en algunos casos se manifiestan frente a cuarteles pidiendo una intervención militar contra el resultado de las urnas.
El jefe del PL, Valdemar Costa Neto, aseguró que el informe “no expresa la opinión” del partido y se ampara, según dijo, en el trabajo de “técnicos especialistas en seguridad de datos”.
- Internacionales