La empresa alemana Bayer se presenta ante un tribunal de Francia por el supuesto vínculo entre la exposición al glifosato, su producto más destacado, de un joven cuando estaba en el vientre de su madre y las graves malformaciones que padece. El juicio civil podría "establecer un precedente en Francia, donde otras posibles víctimas del herbicida más utilizado en el mundo podrían llevar sus casos "más rápidamente" ante la justicia. Los hechos remontan a 2006, cuando su madre Sabine Grataloup usó glifosato para desherbar una pista de equitación, que roció "varias veces al día, sin ninguna protección especial". En ese momento, no sabía que estaba embarazada de "varias semanas". En 2018, sus progenitores denunciaron a la firma Monsanto, que Bayer acababa de adquirir. Esta compañía estadounidense proporcionó la molécula de glifosato a la marca Glyper, el herbicida utilizado por Grataloup, de 54 años. Glyper es "un producto de reventa de Roundup", la conocida marca de Monsanto, y los envases no mencionaban el peligro de malformación, afirmó la mujer, quien aseguró que la empresa minimizó su toxicidad ante las autoridades reguladoras a nivel global.