El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pidió “perdón” a los familiares de los seis rehenes israelíes hallados muertos en Gaza y enterrados en Israel. Además, afirmó que milicianos de Hamas los ejecutaron con un tiro en la nuca. “Les pido perdón por no haberlos traído vivos. Estuvimos cerca, pero no lo conseguimos”, declaró Netanyahu en una rueda de prensa. El movimiento islamista palestino Hamas “pagará un precio muy alto”, indicó. Netanyahu habló en momentos en que su gobierno es fuertemente presionado por alcanzar un acuerdo con Hamas que permita liberar al centenar de rehenes que aún siguen secuestrados en Gaza. Incluso, este lunes se realizó una huelga general, la primera desde el inicio de la guerra hace casi un año, convocada por la principal central sindical Histadrut para exigir un pacto con el movimiento islámico.