El conflicto surgió a raíz de la Ley de Reducción de la Inflación de Estados Unidos que prohíbe a los productores locales a acceder a beneficios fiscales si ciertos componentes del producto fueron fabricados por empresas de China, Corea del Norte, Irán o Rusia. Desde el gobierno chino, buscan impugnar esta decisión para salvaguardar sus intereses en el sector de los vehículos eléctricos. Los países que forman parte de la OMC, con sede en Ginebra, tienen la potestad de presentar quejas sobre las prácticas comerciales de otros socios y buscar compensaciones a través del proceso de resolución de disputas. En este caso, China está impugnando subsidios que considera "de naturaleza discriminatoria" tras los últimos anuncios de Estados Unidos.
- Internacionales