Carlos Bolsonaro, hijo del expresidente Jair Bolsonaro, fue blanco este lunes de una operación de la policía brasileña que investiga una presunta organización que realizaba espionaje ilegal a favor del exmandatario y su círculo íntimo. ”La Policía Federal ejecutó nuevas órdenes de allanamiento e incautación como continuación de la Operación Vigilancia Estrecha”, dijo el organismo en un comunicado. Se trata de un operativo que investiga a un grupo del “crimen organizado” que actuaba dentro de la agencia de inteligencia (Abin) durante el mandato de Bolsonaro y que, presuntamente, utilizó las herramientas y servicios del organismo para espiar ilegalmente a políticos y otras figuras públicas. La policía cumplió nueve órdenes de allanamiento, cinco de ellas en la ciudad de Río de Janeiro, donde Carlos Bolsonaro se desempeña como concejal. Según imágenes divulgadas por la televisión OGlobo, el legislador carioca se encontraba este lunes junto a su padre en una casa en la ciudad litoral de Angra dos Reis. El domicilio fue registrado por agentes. Las otras tres órdenes se cumplieron en Formosa, estado de Goiás (centro) y Salvador, en el estado de Bahía (nordeste). Además, fueron registradas su residencia en Río de Janeiro y su despacho en la Cámara Municipal de la ciudad, según la prensa local. Los operativos son un desdoblamiento del procedimiento lanzado el jueves pasado, autorizado por el juez de la Corte Suprema y presidente del tribunal electoral, Alexandre de Moraes, presuntamente uno de los objetivos del espionaje. ”En esta nueva etapa, la Policía Federal busca avanzar en el núcleo político, identificando a los principales destinatarios y beneficiarios de información producida ilegalmente en el ámbito de la Abin a través de acciones clandestinas”, señaló el comunicado de la policía.
- Internacionales