Rusia informó intensos combates en tres secciones de la línea del frente en Ucrania, un día después de acoger una misión de paz africana que no despertó entusiasmo ni en Moscú ni en Kiev.
Un funcionario instalado por Rusia dijo que Ucrania había recapturado Piatykhatky, un pueblo en la región meridional de Zaporiyia. "La ofensiva 'en oleada' del enemigo dio resultados, a pesar de las enormes pérdidas", dijo Vladimir Rogov en la aplicación de mensajería Telegram.
El Ministerio de Defensa de Rusia no mencionó Piatykhatky en su actualización diaria, en la que dijo que sus fuerzas habían repelido los ataques ucranianos en tres secciones de la línea del frente de 1.000 kilómetros.
Un comunicado separado del grupo de las fuerzas rusas Vostok dijo que Ucrania no había logrado tomar el asentamiento. Reuters no pudo verificar de forma independiente los informes sobre el campo de batalla.
No hubo comentarios de Ucrania, que la semana pasada dijo que había recapturado otro asentamiento cercano, Lobkove, y una serie de aldeas más al este, en la región de Donetsk, en el inicio de su contraofensiva.
Las autoridades ucranianas han impuesto un apagón informativo para contribuir a la seguridad operativa, pero afirman que Rusia ha sufrido pérdidas mucho mayores que sus fuerzas durante el nuevo asalto.
Un funcionario regional dijo que las fuerzas ucranianas habían destruido un importante depósito de municiones rusas en la región ocupada de Jérson, parte de un esfuerzo de semanas de Kiev para causar estragos en las líneas de suministro de Moscú.
La inteligencia británica dijo que los intensos combates de los últimos días se habían centrado en Zaporiyia, el oeste de Donetsk y alrededor de Bajmut, que mercenarios rusos capturaron el mes pasado tras la batalla más larga de la guerra.
"En todas estas zonas, Ucrania sigue llevando a cabo operaciones ofensivas y ha hecho pequeños avances", detalló en Twitter.
Las operaciones de defensa rusas han sido "relativamente efectivas en el sur", y ambas partes han sufrido numerosas bajas, según la evaluación.
Misión de Paz
En las conversaciones celebradas en San Petersburgo, el presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, presentó a su par ruso Vladimir Putin una iniciativa de paz de 10 puntos de siete países africanos y le dijo que había llegado el momento de que Rusia y Ucrania iniciaran negociaciones para poner fin a la guerra.
Putin respondió con una retahíla de acusaciones ya conocidas, negadas por Ucrania y Occidente, y dijo que era Kiev, y no Moscú, quien se negaba a hablar. Agradeció a Ramaphosa su "noble misión".
Las agencias de noticias rusas citaron al portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, diciendo que Putin había mostrado interés en el plan, pero que sería "difícil de realizar".
Ramaphosa trató de valorar positivamente el viaje a Ucrania y Rusia, tuiteando el domingo que "la Iniciativa de Paz para África ha tenido impacto y su éxito final se medirá en función del objetivo, que es detener la guerra".
Afirmó que los líderes africanos seguirían hablando tanto con Putin como con su par ucraniano, Volodimir Zelenski, e informarían al Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, de los esfuerzos realizados hasta la fecha.