“Dicen que de la costilla de un hombre salió la primera mujer, pero la verdad es que el primer hombre salió de las caderas de una mujer”, decía un titular en las pantallas antes de que Shakira cantara Hips don’t lie, que en castellano significa: “Las caderas nunca mienten”, tal como cerró el mensaje en las visuales. Después de seis años, la loba se encontró con su público en Buenos Aires, un lugar que reconoció que siente “tan suyo” y al que le guarda mucho cariño, tras compartir 10 años de su vida con Antonio de la Rúa, hijo del expresidente Fernando de la Rúa. Las calles del barrio porteño de Palermo se inundaron de mujeres, hombres y niñeces que se congregaban hacia el Campo Argentino de Polo, donde tendría lugar la vuelta de la colombiana con “Las Mujeres Ya No Lloran World Tour”. Habían vestimentas de las diferentes etapas musicales de Shakira por cada calle aledaña al estadio: el de odalisca, era de los más distintivos, de aquellas mujeres que vivieron el apogeo de “Donde están los ladrones” (1998) con una joven loba que en sus videoclips movía las caderas de una forma peculiar, a la que todas las mujeres querían copiar. El peluquín violeta de “Las de la intuición” también estuvo presente en varias mujeres que vivieron el 2005 con el boom de “Fijación oral vol. 1”. Y es que, hay una Shakira para cada época que queramos recordar, los más chicos estaban con la “Loba”, la de “La bicicleta” y la de la session vol. 53 de Bizzarrap. Shakira se reencontró con su público. Llegó desde el lateral e ingresó por una pasarela, que utilizó en más de una ocasión para saludar y estar más cerca de su gente. Arrancó con “La fuerte”, del álbum homónimo a la gira, con un atuendo blanco y acompañada de bailarines pequeños y adultos, quienes la escoltaron y saludaron previo a que arranque el show delante de todo el estadio. El espectáculo continuó rápidamente con “Girls like me” (2020), canción que colabora con Black Eyed Peas, donde primero se arrancó la parte de arriba y luego hizo volar los pantalones, y quedó con un vestido rosa con el que interpretó “Las de la intuición” y el estadio estalló, en un midley junto a “Estoy aquí”, la primera canción que realizó de Pies descalzos (1995).