La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) acordó un aumento del 110% para la paritaria que cierra en marzo de 2023, pero no logró sumar el bono de $50.000 que había pedido en las reuniones que formaron parte de la revisión de fin de año.
Según lo convenido con las cámaras empresarias del sector, al 65% que habían acordado en julio se sumará un 45% a pagarse en cuatro cuotas: un 11% adicional en diciembre, un 11% en enero, un 11% en febrero y 12% en marzo.
Días antes de recibir a la vicepresidenta Cristina Kirchner en su reaparición pública tras el atentado que sufrió en la puerta de su domicilio del barrio porteño de Recoleta, la UOM participó del primer encuentro para la revisión paritaria 2022/2023, en el que pidió 111% de aumento y un bono de $50.000 a pagarse entre fin de año y antes de que comience el ciclo lectivo del año próximo.
La primera revisión paritaria del acuerdo entre la UOM y las cámaras empresarias del sector metalúrgico se cerró en julio, en donde ambas partes habían acordado un incremento del 15% en julio; otro del 12% en agosto, y dos de 10% en octubre y noviembre. Totalizando así un 65% anual.
Si bien tiene vigencia hasta el 31 de marzo de 2023, como parte de lo convenido, resolvieron una revisión en febrero, pero ante la escalada inflacionaria, a mediados de octubre el gremio pidió que se adelante a noviembre. Tras varios encuentros en que las negociaciones se habían empantanado, finalmente lograron destrabarlo este lunes, pero sin el bono y un punto porcentual por debajo del reclamo sindical.
Cómo serán los aumentos de la paritaria 2022/2023 de la UOM
Al 65% ya acordado (15% en julio; 12% en agosto, y dos de 10% en octubre y noviembre), se suma un 45% en los siguientes tramos:
11% en diciembre.
11% en enero.
11% en febrero.
12% en marzo.
De esta manera, el aumento del año paritario suma un 110% entre abril 2022 y marzo 2023.
Tras firmar el de los trabajadores del sector metalúrgico con las cámaras empresarias, la ministra de Trabajo, Kelly Olmos, reivindicó las paritarias como el ámbito de negociación salarial y ratificó que el objetivo es que los ingresos logren ganarle a la inflación. Los empresarios del sector coincidieron con esa mirada.
“Reivindicamos la negociación paritaria como base del propio sistema democrático. Tenemos un ejercicio de alcanzar acuerdos, que es muy valioso. Aspiro a quebrar la alta inflación y seguir ganando más derechos para las y los trabajadores”, dijo la funcionaria.
José Luis Ammaturo, presidente de la Cámara de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica Argentina (CAMIMA), reconoció que “después de arduas negociaciones se alcanzó un acuerdo, siempre buscando que los salarios acompañen a la inflación, con proyecciones a futuro y revisiones”.
“El bono fue desistido porque no le sirve ni a las empresas ni al trabajador, porque es por única vez, no forma parte del salario y no le permite proyectar sus ingresos”, destacó el dirigente empresario.
También pidió que, siguiendo el mismo camino, “el Gobierno desista de otorgar el bono de fin de año, dado que las paritarias se han desarrollado normalmente sin llegar a ningún tipo de conflicto”.