La inflación podría seguir desacelerando en lo que resta del año, según el pronóstico de los principales analistas del mercado.
Sería por una combinación de la suba controlada del 2% mensual que mantiene el Banco Central (BCRA) sobre el tipo de cambio oficial, la reducción de la alícuota del impuesto PAIS a las importaciones y la firmeza del Gobierno sobre el mantenimiento del superávit fiscal.
Según un reporte de LatinFocus, que incluye estimaciones de más de 50 consultoras y bancos privados, tanto de la Argentina como del exterior, el costo de vida aún tiene margen para seguir descendiendo.
A esto también contribuiría que el presupuesto para 2025 apunta a que los ingresos superen ligeramente los gastos el próximo año gracias a la continua moderación del gasto.
Para fin de año, los analistas esperan que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) acumule una suba del 131,4% interanual. Este pronóstico baja 10,3 puntos porcentuales respecto de la encuesta previa (141,7%).
A modo de comparación, el Gobierno estimó en el Presupuesto 2025 que la inflación sea del 104,4%.
El Indec informó que hasta septiembre los precios acumularon un aumento del 101,6%.
En septiembre, el gobierno redujo el impuesto PAÍS del 17,5% al 7,5% para las importaciones de bienes y fletes, lo que contribuyó a cierta desaceleración de ciertos precios específicos para ese mes.
Además, el reporte destaca que el gobierno no ha indicado ningún cambio en el esquema actual de ajuste del tipo de cambio del 2% mes a mes en el corto plazo.
Considerando esto, un reporte del BBVA Research proyectó una baja en la previsión de inflación anual para 2024 del 135% al 130%.
En la misma línea, Itaú Unibanco calculó que la inflación seguirá desacelerándose en los próximos meses, como resultado de la dinámica del tipo de cambio, la reducción de los aranceles a las importaciones y las presiones moderadas por parte de la demanda.
Su proyección es del 130% para finales de 2024.
Las únicas consultoras que prevén un dato mucho más pesimista fueron MAPFRE Economics (190,9%), EMFI (168,5%), Moody’s Analytics (163,7%), Santander (150,5%) y UBS (150,3%).
En cambio, las cifras más bajas las arrojaron Quantum Finanzas (116%), Econométrica (117%) y OJF & Asociados (117,5%).
La inflación debería seguir disminuyendo en el futuro sobre la base de una alta base de comparación, un gasto público restringido y una reciente reducción de un arancel de importación clave. Sin embargo, la depreciación de la moneda y los recortes de subsidios mantendrán la inflación alta según los estándares de América Latina.
El informe de LatinFocus advirtió que la inflación de tres dígitos y la fuerte consolidación fiscal estuvieron detrás de la caída de la actividad económica, a pesar de que en los últimos meses repuntaron el sector agrícola y hubo un aumento de la producción energética.
Los analistas prevén que el año cierre con una contracción del PBI del 3,6% (una baja de 0,1 puntos porcentuales respecto de hace un mes), pero que rebote un 3,4% en 2025.