“Diseñé un formato que no sea vulnerable a los cambios de la macro (economía)”, señaló el presidente Javier Milei a su entorno con referencia a la elaboración del proyecto de presupuesto nacional para 2025. El primer mandatario se encuentra personalmente involucrado en la confección de este proyecto que prevé enviar al Congreso antes del 15 de septiembre próximo. Desde este punto de vista, explican que la intención del primer mandatario es que, si por alguna razón los ingresos resultaran subestimados y en la práctica los recursos del Estado fueran superiores a los previstos, estos excedentes se destinarán a bajar impuestos y no a aumentar el gasto, como se hizo históricamente. En el escenario contrario, es decir que la estimación de ingresos resulte inferior a la real, la decisión será recortar partidas porque, por supuesto, mantener en cero el déficit financiero (incluyendo el pago de intereses de la deuda) es un objetivo central, señalan en medios oficiales.