Aerolíneas Argentinas eliminará su ruta a Nueva York, en medio del proceso de racionalización de la compañía que ya incluyó el final de los vuelos a La Habana, Cuba. La compañía va a hacer oficial en las próximas horas la decisión.
Eliminar la ruta que va desde Ezeiza al Aeropuerto JFK de Nueva York persigue el objetivo de aumentar la productividad de la flota de la en los destinos de mayor rentabilidad. La ruta a Nueva York se suspenderá a partir del 10 de agosto.
Según explicaron fuentes de la empresa, la modificación permitirá aumentar a dos vuelos diarios la oferta a Miami y a Madrid, además de disponer recursos para aumentar frecuencias al Caribe, destinos más rentables. Otra ruta que prometen reforzar es la de Roma, Italia.
El resonante recorte en uno de los destinos más significativos a los que volaba Aerolíneas Argentinas responde a una política de evaluación permanente sobre la rentabilidad de rutas. “El camino elegido en este escenario fue el de reforzar y priorizar la operación a los destinos de mayor beneficio económico para la compañía”, dijeron fuentes de la línea aérea.
Según informaron, tan solo durante febrero y marzo de este año, la ruta Ezeiza-Nueva York arrojó números negativos por cerca de 250.000 dólares. En el año, en la empresa, se proyectaba una pérdida total por encima del millón de dólares.
Según fuentes de la aérea, la ruta “se prendió y se apagó varias veces” en los últimos años. Por ejemplo, durante el gobierno de Mauricio Macri estuvo de baja un tiempo, pero después se volvió a habilitar.
La eliminación de la ruta, sin embargo, no implica que se dejará de vender el vuelo. Se podrá adquirir el mismo destino desde la Argentina a través de los vuelos de código compartido que Aerolíneas Argentina mantiene con su socia, la americana Delta. Por lo pronto, aquellos pasajeros que ya tienen pasajes para después del 10 de agosto van a ser reubicados en vuelos directos de otras aerolíneas o, alternativamente, en vuelos vía Miami. Eso se informará en forma directa a cada pasajero.
“La decisión se basa en un análisis comercial que busca proteger y potenciar a la compañía, además de fortalecer y priorizar los destinos que le resulten más beneficiosos económicamente”, habían explicado fuentes de la empresa aérea.
El cambio, agregaban, permitiría además eficientizar las horas de tripulación de cabina, de pilotos y de otros servicios dedicados a esta ruta en particular. Otro objetivo era mejorar la calidad del servicio de la ruta a Cancún, ya que la ruta que recalaba en la capital cubana era un trayecto combinado entre Buenos Aires, Cancún y La Habana.
Retiros voluntarios
En paralelo, la empresa abrió un retiro voluntario para su personal en tierra en marzo. En el sector hay “cerca de 8.000 empleados” y la nueva gestión no se planteó un objetivo en particular, sino lanzar la idea para ver si existía interés entre ellos. En total, la línea aérea de bandera tiene unos 11.800 empleados.
Se trata de un “plan de retiro gratificado”, según la nota enviada por la conducción de la empresa al personal de tierra. Los requisitos para participar son: “formar parte del staff de tierra, operativo o administrativo), poseer una antigüedad mayor a dos años no estar dentro del plan de acuerdo prejubilable”.
La empresa informó que el retiro “se abonará en un plan de pagos mensual, equivalente al 50% de antigüedad en años al momento de la firma. Por ejemplo, si se posee 20 años de antigüedad, se abonará en 10mensuales”.
“Estos pagos serán ajustados, según los incrementos salariales paritarios acordados con la empresa”, se aclaró.
“Las personas interesada podrán asesorarse acerca del programa sin ningún compromiso de adhesión, completando el formulario”, se explicó la compañía presidida por Fabián Lombardo, quien tiene una amplia trayectoria en la industria aerocomercial.