En diciembre de 2023, el precio del tomate redondo disminuyó un 24,5%, pasando de $1187,84 a $896,42 por kilo. Esta reducción es especialmente significativa en comparación con la tendencia inflacionaria general.
Por qué bajó el precio del tomate
Oferta y demanda: un aumento en la oferta de tomates podría haber llevado a una disminución en los precios.
Condiciones climáticas favorables: un clima propicio podría haber aumentado la producción, contribuyendo a la oferta.
Factores del mercado: cambios en las dinámicas del mercado, como la competencia y las preferencias de los consumidores, también pueden haber influido.
Esta disminución en el precio del tomate ofrece un respiro para los consumidores, especialmente en un contexto económico donde los precios de los alimentos básicos están en constante aumento.