El Ministerio de Economía, que encabeza Sergio Massa, renovó los acuerdos de precios por 90 días en nueve sectores, para intentar contener una inflación que las consultoras estiman en dos dígitos mensuales, luego de la devaluación del 22% del tipo de cambio oficial post PASO y el salto de los dólares financieros.
Precios Justos: qué productos estarán alcanzados
Quedarán alcanzados en el programa Precios Justos: calzado, celulares, consumo masivo, indumentaria, insumos difundidos, motos y línea blanca y pequeños electrodomésticos. La semana pasada habían cerrado con laboratorios y petroleras por combustibles. Cada sector tendrá un esquema diferenciado. En medio de las duras negociaciones, el equipo económico debió implementar una nueva estrategia: aplicará rebajas en al menos cuatro impuestos y dejará su compromiso por escrito a través de un decreto que se publicará en los próximos días en el Boletín Oficial, para que se sumen algunas compañías que estaban reticentes.
Los acuerdos de precios se extenderán por 90 días, hasta el 31 de octubre, post elecciones generales, pero los porcentajes de aumento variarán según el sector. Para consumo masivo, por ejemplo, habrá topes de aumento de 5% mensual. Lo mismo firmaron con los laboratorios nacionales para medicamentos. Con petroleras y refinerías, se acordó un segundo aumento para la nafta en agosto, del 12,5%, y luego el congelamiento. Según difundió la Secretaría de Comercio, quedan incluidas más de 350 empresas.
Arduas negociaciones
Precios Justos es el acuerdo voluntario que lanzó Massa a principios de 2023 para intentar moderar la inflación. Las empresas lo iban renovando a través de resoluciones que firmaban con la Secretaría de Comercio, que a cambio ponía como “zanahoria” la facilidad para importar a través del sistema SIRA.
Sin embargo, después de las primarias las empresas decidieron adoptar otra postura, según confiaron a Ámbito fuentes del sector privado. Las compañías aseguran que los aumentos habilitados por el Gobierno no cubren la suba de los costos que implicó un impuesto del 7% a las importaciones y una devaluación del 22% del tipo de cambio oficial. Aseguran que las promesas de acceso a dólares “no se cumplieron” y que el Gobierno tiene “menos espalda” para negociar, luego de terminar como tercera fuerza en las primarias.
Por eso, Massa tomó otra postura para cerrar los acuerdos. Citó a las negociaciones directamente a los CEO de empresas de consumo masivo, petroleras y laboratorios. Y designó a cargo de las negociaciones a Guillermo Michel, titular de la Aduana, a través de la creación de la llamada Unidad de Negociación de Acuerdos de Precios.
Inicialmente, las empresas citadas a las reuniones en Economía fueron con propuestas de aumentos que llegaban hasta el 25%. Sin dólares para ofrecer, con un Banco Central con reservas negativas y un proceso de dolarización electoral intensificado, Michel ofreció una nueva “zanahoria”, esta vez fiscal. Y el compromiso de formalizarla a través de un decreto.
Según anticiparon fuentes oficiales, la publicación del decreto en el Boletín Oficial será en el transcurso de esta semana. La novedad de la oficialización vía decreto, a diferencia de acuerdos anteriores, se explica para darle un carácter más formal, ya que incorpora una serie de beneficios que pone el Estado, indicaron en Economía.
El borrador del decreto, que circuló entre las empresas que estarán comprendidas en Precios Justos establece que los sujetos que cumplan con los acuerdos de precios podrán gozar de cuatro beneficios: 1) la suspensión del pago del impuesto PAIS a las importaciones; 2) la reducción a 0% en derechos de exportación para mercaderías comprendidas en posiciones arancelarias del Mercosur; 3) la suspensión de una resolución de AFIP, lo que les permite a empresas que tienen certificados de no percepción no sufrir percepciones impositivas de IVA o Ganancias y 4) la prórroga para vencimientos de impuestos a la seguridad social.
Las negociaciones fueron más duras que en ediciones anteriores. Según fuentes del sector privado, los supermercados acordaron sumar al listado marcas propias, pero hubo grandes alimenticias reticentes a ingresar algunos productos. El lunes de la semana pasada en una reunión en la cámara que agrupa a las alimenticias, Copal, redactaron un documento para elevarle a Massa. El viernes volvieron a juntarse las multinacionales. Aseguran que hay ítems que no les representan beneficios, como la quita del impuesto PAIS, dado que nunca se implementó para la cadena alimenticia. Y que desde el 15 de julio, última renovación de Precios Justos, la devaluación superó el 30%, por lo que ven “inviable” poner ciertos ítems con topes de aumento del 5% mensual.