Sergio Massa llega a China junto a una amplia comitiva de funcionarios y dirigentes políticos del gobierno. El ministro de Economía buscará acelerar desembolsos por unos u$s1.000 millones vinculados a las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic que se están construyendo en la Patagonia. También apunta a renovar y ampliar el uso de un tramo del swap vigente con el Banco Popular del gigante asiático. Se oficializará el listado de obras de infraestructura prioritarias a realizarse en el marco de la adhesión a la Ruta de la Seda. La embajada ya tiene redactada una serie de nuevos convenios los que solo falta la firma.
Los tiempos se aceleran. La escasez de divisas pone en jaque la cada vez más precaria estabilidad cambiaria. El Gobierno busca por todas las vías posibles fortalecer las reservas del Banco Central y China, segunda economía de mayor tamaño en todo el planeta, podría ofrecer una serie de herramientas para morigerar el impacto de la sequía sobre las tenencias de la entidad monetaria en el corto plazo.
La agenda de Massa
La agenda de Massa será intensa. Este mismo martes, pocos minutos después de arribar a Shanghái, tendrá un encuentro con directivos de Gezhouba Group, la empresa que está a cargo de la construcción de las represas Kirchner y Cepernic. Según pudo confirmar Ámbito con fuentes al tanto de las negociaciones, el ministro está muy cerca de conseguir que se aceleren desembolsos por cerca de u$s1.000 millones.
El instrumento clave para conseguir esos fondos es la firma de la adenda 12 que contempla una serie de modificaciones en la ingeniería inicial de las obras, las complicaciones que produjo la pandemia en los plazos y el esquema del financiamiento, entre otros. Ni bien asumió en el Palacio de Hacienda, Massa se puso como objetivo reactivar el ingreso de fondos que se habían paralizado en 2021. Por aquel entonces, los trabajos se estaban sosteniendo con recursos del Tesoro. El mes pasado anunció un primer avance por u$s500 millones y ahora esperan dar un paso más.
El capítulo más relevante en el plano financiero se desarrollará en Beijing, en un encuentro con el titular del Banco Popular de China del que también participará el presidente del BCRA, Miguel Pesce. Argentina buscará renovar el swap de monedas vigente y ampliar el tramo de “libre disponibilidad”. Es decir, la cantidad de yuanes (hasta ahora el equivalente a u$s5.000 millones) que se pueden utilizar para pagar importaciones sin tener que desembolsar dólares.
Un alto funcionario que trabaja en el tema y ya está instalado en China le confirmó a este medio que las negociaciones están avanzadas y que la ampliación podría sumar entre u$s3.000 y 4.000 millones. Eso llevaría el total a cerca de u$s8.000 millones, cifra similar al rojo comercial que estiman para este año con China.