En un escenario de discusión de medidas que podrían ponerse en marcha para frenar una nueva corrida cambiaria y desacelerar la suba de los precios, la titular de la cartera energética, Flavia Royon, se reunió con los principales representantes de las petroleras. El objetivo fue discutir un posible congelamiento de precios de la nafta y el gasoil en el surtidor.
El CFO de YPF, Alejandro Lew, aseguró que los precios internacionales de los combustibles “hallaron un grado de paridad con los valores locales en los surtidores” y estimó que no sería necesario otro aumento, aunque no descartó continuar con las alzas de 4% mensuales que se acordaron con el Ministerio de Economía.
“Continuamos con nuestra estrategia de ajustar los precios de los combustibles locales de manera de mitigar el efecto de la depreciación de la moneda, al tiempo que se reduce o evita agrandar la brecha entre la cotización de los combustibles locales frente a las paridades internacionales”, sostuvo Lew durante una presentación con inversores de la compañía.
Consultado por la perspectiva de precios para los próximos seis meses y la continuidad de los combustibles en Precios Justos, Lew contestó: “Pudimos aumentar los precios por lo menos una vez al mes. Estamos intentando, como mínimo, seguir la evolución de la devaluación de la moneda y tratar de mantener nuestros precios en dólares tan estables como sea posible”, concluyó el ejecutivo de la petrolera estatal.
Ante este panorama, las principales petroleras del país no se mostraron del todo conformes con las declaraciones del directivo de YPF y se reunirán con la secretaria de Energía para analizar el congelamiento.
En rigor, fuentes del sector empresarial expresaron al medio especializado EconoJournal que “medido en pesos constantes -es decir, descontando el impacto de la devaluación y la evolución del Índice de Precios al Consumidor- el precio actual en surtidores es el más bajo de los últimos años”.
El paquete de medidas que evalúa Sergio Massa para contener la crisis económica
Tras conocerse el dato de inflación de 8,4% de abril, el equipo económico mantuvo reuniones durante todo el fin de semana y el domingo por la mañana anunció nuevas medidas para intentar contener la suba de precios y la tensión cambiaria.
Entre las políticas pautadas figura una suba de tasas de referencia al 97% -que impacta sobre los plazos fijos- para evitar un traslado de los pesos de los ahorristas al dólar. También se prevé ampliar la intervención del Banco Central (BCRA) en el mercado de los dólares financieros.
Entre las últimas definiciones, el titular del Palacio de Hacienda dispuso la reducción de las tasas que se aplican en el programa Ahora 12 con el objetivo de alentar el consumo de determinados bienes y servicios.
A partir de la semana próxima se reducirá en un 9% del costo de financiamiento para las compras de productos nacionales a través del programa “Ahora”. Si finalmente el anuncio se implementa, la baja de la tasa de interés se aplicará únicamente para el plazo de 12 cuotas, manteniéndose sin variantes el resto de los planes.
Esta medida tiene como objetivo sostener el nivel de consumo y promover la adquisición de productos de origen nacional, que representan más de 5,8 millones de transacciones mensuales por un valor total de más de 250 mil millones de pesos. De esta forma, la tasa de interés del 81,75% se reducirá al 72,75% anual, muy por debajo de la inflación ya estacionada por encima del umbral del 100%.