El regular desempeño que mostró a lo largo de abril el Programa de Incremento Exportador (PIE), el efecto de la sequía y la caída de las importaciones producto de las restricciones para el acceso a divisas, impactaron negativamente en la recaudación fiscal del último mes, que concluyó con ingresos por $2,5 billones y un crecimiento nominal del 90%, según informó el Ministerio de Economía.
El dato refleja el impacto negativo sobre los recursos tributarios totales en el cuarto mes de 2023. Si se compara contra la inflación acumulada estimada del 109% en el período de 12 meses, la recaudación cayó en términos reales 7,8% según estimó el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF).
Al respecto, el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) , Carlos Castagneto, reflejó su disgusto con el campo a través de las redes sociales: “Los derechos de exportación tuvieron un resultado negativo del 48% producto del impacto de la sequía y la falta de liquidación del sector agroindustrial, a pesar de los beneficios que se les ha otorgado a los mismos”, afirmó.
En el acumulado del primer cuatrimestre, la AFIP pudo cobrar tributos por $9,2 billones, lo que marcó un incremento levemente superior al 88% nominal, también por detrás de la inflación. Por otro lado, tal como lo previeron consultores privados, los impuestos relacionados con la actividad interna mostraron un buen desempeño.
Por el lado de los impuestos al comercio exterior, las retenciones registraron una caída de casi el 50% nominal al sumar apenas $50.561 millones. Según estimaciones privadas, las cerealeras declararon en abril unos u$s2.500 millones de exportaciones, casi la mitad que el año pasado. Los aranceles a las importaciones y la tasa de estadística reportaron $72.850 millones, 61% nominal mejor que en abril de 2022.
El mejor desempeño fue el del IVA que tuvo un incremento del 117,3%, por encima de la inflación. El impuesto aportó a las arcas $921.091 millones. El IVA DGI, vinculado a la actividad interna, tuvo un incremento del 130%, lo que indica que hubo una aceleración del consumo en marzo ya que el impuesto muestra la evolución de la facturación del mes anterior.
El Impuesto a las Ganancias, que es el otro pilar de los ingresos fiscales, tuvo ingresos por $499.467 millones con una suba del 88%, por debajo de la inflación de los últimos 12 meses.
En cuanto a la seguridad social, las contribuciones patronales recaudaron $375.494 millones, con una mejora del 116% por encima de la inflación, lo que refleja la mayor masa salarial, aunque los aportes personales mostraron una suba algo menor que la evolución de los precios. Sumaron $232.840 millones con un alza del 104,7%.
En el caso del Impuesto a los Bienes Personales, se registraron entradas por $59.949 millones con una suba del 69,3%. Incidió a favor el incremento de la alícuota para las percepciones por compra de moneda extranjera, que pasó de 35% al 45%, y la implementación de una alícuota adicional del 25% aplicada a viajes y gastos en el exterior.